¿Quién no se ha sentido profundamente
halagado ante un obsequio o servicio hecho con gracia y ha experimentado la
tierna necesidad de reciprocar?
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No hay persona alguna que se haya presentado ante mí
con un presente de carne seca (en pago a la enseñanza) a la que me haya negado
a enseñarle algo. (Confucio)
¿O ha visto cómo cuando se es dadivoso los
demás se toman más interés en atendernos y ofrecernos el servicio que es su
responsabilidad darnos, y a veces hasta el que ni siquiera le toca?
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Dando y hablando bien, se ganan las voluntades.
(Quevedo)
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Dádivas quebrantan peñas. (España)
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Dádivas y buenas razones, ablandan piedras y
corazones. (España)
Como actitudes inadecuadas ante el dar y
servir a los demás pueden mencionarse la mezquindad del que escatima ridículamente en gastos para atender
a otros, lo que tiende a generar rechazo en los demás y aislamiento social.
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Dádiva de ruin a su dueño parece. (España)
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Manos que no dais, ¿qué buscáis? (Galicia, España)
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Amigo que no presta y cuchillo que no corta, que se
pierda, poco importa.
El empalago del que obsequia inoportunamente o utiliza regalos fuera
de lugar para el tipo de relación existente con el obsequiado, lo cual,además
de rechazo, causa desconfianza.
- La dádiva inoportuna
genera desconfianza.
Y el dar, a veces mucho, pero con asperezas, lo cual
deja sin efecto la buena acción.
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La manera de dar vale más que lo que se da.
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Hay quien desbarata con los pies lo que hace con las
manos.
Como actitudes saludables se encuentran el dar
o servir graciosamente con la medida adecuada y en el lugar y momento oportunos.
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Las dádivas tienen su lugar, momento y medida.
Lo anterior, por lo general, gana la voluntad
del obsequiado y lo predispone a servirnos mejor.
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El que saciare será saciado.
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Da el ala, te comerás la pechuga. (San Salvador)
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La gran prosperidad no viene si la pequeña no va.
(China)
CONSIDERACIONES FINALES
Como actitudes
inadecuadas ante el acto de dar o servir a otros se encuentran la mezquindad del que escatima ridículamente en gastos, el hacerlo
inoportunamente o con regalos fuera de lugar para el tipo de relación existente
con el obsequiado, y el dar, a veces mucho, pero sin delicadeza. Como actitudes
saludables pueden mencionarse el dar graciosamente en el lugar y momento oportunos.
Esto es todo por hoy, luego seguimos con más. Muchas gracias.
DADIVOSIDAD por Arturo José Sánchez Hernández.
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